EL LIBRO DEL SOÑAR
Y
EL ENSAYO DE LA MUERTE
Gianella Galo
Ritmo Divino
Por lo tanto unitario, global, interior, división indivisa a la cual le corresponde un cuento.
El pequeño pez
“Usted perdone”, le dijo un pez a otro,
“es usted más viejo y con más experiencia que yo y probablemente podrá usted ayudarme.
Dígame ¿dónde puedo encontrar a eso que le dicen Océano?
he estado buscándolo por todos partes, sin resultados”.
“El Océano”, respondió el viejo pez, “es donde estás ahora mismo”.
“¿Esto? Pero si esto no es más que agua…
Lo que yo busco es el océano”, replicó el joven pez,
totalmente decepcionado, mientras se marchaba
nadando a buscar en otra parte.64
Les confieso, queridos lectores, que comencé a escribir este ritmo con el ánimo de ser aceptada por todos aquellos hombres que no creyeran en Dios, para que salvando esa aparente distancia pudieran entender la verdad que se oculta en este cuento-rítmico. Rápidamente fui colocada en mi sitio, porque no debo tratar de ser aceptada, sino simplemente de transmitir lo que se me da.
Así que me pregunté: ¿Qué es creer en Dios, en su existencia, presencia?
Por lo que reanudé este capítulo tratando de encontrar en la etimología y en la ontología del término Dios un saber más profundo.
Dios, Deus, Theos, Allah, Yahvé, Jehová, God, Gott, Padre, Rey, Zeus, y por ahí arrancamos.
Dice el diccionario que Dios es: Un Ser de atributos o poderes sobrenaturales, deidad (diosa de sexo femenino).
Al ser sobrenaturales los atributos, no hay manera de conocerlos por medio de los sentidos habituales, así que podemos deducir de ello, que lo mismo nos pasará con aquel a quien queremos conocer.
¿Cuáles serán entonces nuestros atributos sobrenaturales a semejanza de Él, que nos permitirán conocerlo? Ahora recordemos aquel tema tratado en la Vortificación, sobre que solo se puede ser receptor de aquello que es conforme a su naturaleza.
Así que rastreemos los dones sobrenaturales que nos hacen semejantes a Él:
…Y nos ha dado la inteligencia para conocer al Verdadero, (la verdad).65
Inteligencia.
leémos en el versículo 5 de la 2ª Epístola de San Juan:
Y ahora te ruego, Señora, y no te escribo un mandamiento nuevo, sino el que tenemos desde el principio: que nos amemos unos a otros. Y en esto consiste el amor : en que vivamos según sus mandamientos. Este es el mandamiento que oísteis desde el principio: que caminéis en el amor.
Memoria de los que se nos ha dicho, dentro de ella la facultad de recordar.
Amor.
Y por último en la1a Epístola de San Juan, capítulo 2, versículo 17:
… pero quien cumple la voluntad de Dios permanece para siempre…
Voluntad.
Veamos esos dones sobrenaturales: Inteligencia.66
Memoria y Recuerdo.
Amor. Voluntad.
Potencias todas ellas que nos asemejan a ese Ser Sobrenatural.
Para las Ciencias sagradas:
Inteligencia, es la capacidad del hombre de buscar la felicidad de modo directo. El intelecto responde a la mayor o menor capacidad de amar de la persona. Intuición, apertura, percepción, deshacerse de lo que no sirve.
Memoria, es la facultad de retener cosas pasadas, presentes y futuras. Pasado es recordación.
Presente es suscepción.
Futuro es previsión.
Amor, capacidad del alma de reconocerse en todos y todo, que provoca un arrebato fulminante de identificación hacia cualquier otro que me sobrecoge dándome el entendimiento sin palabras del corazón.
Será interesante ver en la tradición cabalista donde se agrupan en el árbol de la vida, las cualidades antes descriptas.
En los textos sagrados se dice que fuimos creados a imagen y semejanza.
Hay que ir lentamente…
Semejante, es un adjetivo que se usa en sentido de ponderación. Que se parece, que es similar.
En geometría se usa para hablar de figuras parecidas pero de distinto tamaño.
Semejanza: figura retórica para significar el parecido entre dos objetos.
Como criaturas somos semejantes, aunque geométricamente somos de distinto tamaño.
Retórica: Arte que enseña las reglas del bien decir en el lenguaje escrito y hablado. Figura de retórica, giro que cambia la expresión del pensamiento para hacerlo más claro o más fácil de comprender.
Del latín rhetorica, del griego rhetoriké, femenino de rhetorikós, relativo a la oratoria, de rethor, orador, el que habla.
Por otro lado sabemos que Dios habla y sí se ha hecho oír.
Y también debido a ello momentáneamente alguno ha quedado sordo.
Él habló. En esto coinciden todas las tradiciones.
¡Yo Soy¡, dice de sí mismo y en todas las tradiciones aparece ese Ser superior presentándose a diferentes hombres, en distintas épocas, y en apariencia con distintos nombres ya que esa ilusión se da por el uso de distintos idiomas, una vez buceamos en el sentido que oculta el nombre se habla del mismo Ser…
Lo que es permanente es que en todo tiempo se ha manifestado.
Semejantes a Él, el hombre posee en su constitución física un aparato que le permite junto al uso de su mente tener un lenguaje articulado por lo cual habla.
Él habla, nosotros hablamos.
Dios es en el sonido, en la acción sonora, en el verbo se manifiesta su acción, existencia67, esencia, estado o pasión.
Es palabra.
En cuanto a la imagen.
¿Pero qué es ser imagen?
Imagen: representación del aspecto de alguien o de algo: del latin imaginem, acusativo de imago (radical imagin), imagen, retrato, efigie; visión; idea, pensamiento.
¡Sabemos que a Dios nadie lo ha visto nunca!
Se apareció como fuego, como una nube, en forma de sombra, fue su descripción una imagen velada.
Quiere decir que el hombre en la forma física,
y en su semejanza también es una imagen velada de su verdadero sí mismo o esencia.
Prosigamos…
Cuando Dios se le apareció a los hombres, su aspecto era protegido por una nube;
los pocos que se atrevieron a subir hasta su trono para verlo quedaron ciegos.
Recordemos a Moisés en el Monte frente a Dios, y todas las precauciones que tuvo que tomar antes de subir a Dios.
Yahvé dijo a Moisés: “Yo me acercaré a ti en una densa nube para que el pueblo me oiga hablar contigo, y así te crea para siempre”68
Esto es así para judíos, musulmanes y cristianos.
Pero recorramos otras tradiciones para entender la presencia Divina y como él se muestra solo a los que él quiere, y qué descripción hacen de su presencia.
En el Bhagavad–Gita, Arjuna implora la inconcebible gracia de que le sea revelada la forma de la Suprema Personalidad de Dios.
Capítulo 11: La forma Universal.
En el texto 8:
“Pero tú no puedes verme con tus ojos actuales. Por lo tanto, te doy ojos divinos. ¡mira mi opulencia mística!”.
En el texto 7: “¡Oh, Arjuna!, todo lo que quieras ver, ¡obsérvalo de inmediato en este cuerpo Mío! Esta forma universal puede mostrarte todo lo que deseas ver y todo lo que vayas a querer ver en el futuro. Todo –lo móvil e inmóvil– está aquí por completo, en un solo lugar”.
Texto 12:“Si cientos de miles de soles aparecieran en el cielo al mismo tiempo, su brillo podría semejarse al de la refulgencia de la persona Suprema en esa forma universal”.
Texto 13: “En esos momentos, Arjuna pudo ver en la forma universal del señor las expansiones ilimitadas del universo, situadas en un solo lugar aunque divididas en muchísimos miles”.
Texto 16: “¡Oh, Señor del universo, ¡oh, forma universal!, veo en tu cuer po muchísimos brazos, barrigas, bocas y ojos, expandidos por doquier, sin límites. No veo en Ti ningún final, ningún medio ni ningún principio”.
Texto 17: “Tu forma es difícil de ver debido a su deslumbrante refulgencia, la cual se difunde por todas partes, tal como un fuego ardiente o como el inconmensurable fulgor del Sol.
Y, sin embargo, veo esa deslumbrante forma en todas partes, adornada con diversas coronas, mazas y discos”.
Texto 18: “Tú eres el objetivo supremo primario, el supremo lugar de soporte de todo este universo. Tú eres inagotable y lo más antiguo que existe. Tú eres el sustentador de la religión eterna. La personalidad de Dios. Esa es mi opinión”.
Texto 14: “Luego, confundido y asombrado, y con el vello erizado, Arjuna bajó la cabeza para ofrecer reverencias, y con las manos juntas comenzó a orarle al Señor Supremo”.
Para el Cristianismo y el Catolicismo hay por primera vez una imagen de Dios cuando envía a su hijo Cristo.
“Él (Cristo) es imagen de Dios invisible.
Primogénito de toda la creación, porque en él fueron creadas todas las cosas, en lo cielos y la tierra, las visibles y las invisibles, tronos, dominaciones, principados, potestades:
todo fue creado por él y para él,
él existe con anterioridad a todo, y todo tiene en él su consistencia.
Él es también la cabeza del cuerpo de la Iglesia:
él es el principio,
el Primogénito de entre los muertos, para que sea él el primero en todo,
pues Dios tuvo a bien hacer residir en él toda la plenitud, y reconciliar por él y para él todas las cosas, pacificando, mediante la sangre de su cruz, los seres de la tierra y de los cielos.69
Luego dice Juan: Dios es luz.
Sin embargo más adelante Jesús dice de sí mismo: Yo Soy la luz del Mundo.
Como ¡Yo soy!, es La Luz, superlativa y totalizadora,
Jesús es el Yo Soy y la luz del mundo.
“A Dios nadie lo ha visto nunca”.
Jesús dice, Yo le conozco, porque vengo de Él
y Él es el que me ha enviado.
Luego hay la revelación de la verdadera imagen del Cristo cuando manifestó su gloria, en la transfiguración.
Dice en el Evangelio de San Mateo, capítulo 17, versículo 2:
Y se transfiguró delante de ellos: su rostro se puso brillante como el sol y sus vestiduras se volvieron blancas como la luz.
De esa manera nos mostró nuestra verdadera imagen, aquella que se encuentra velada en el cuerpo carnal o vestidura en la cual habitamos.
En el texto hindú, se muestra la magnificencia de Dios.
Arjuna es nuestro Moisés.
En la narración del Bhagavad–Gita se describe el esplendor del padre eterno,
de su manifestación aclarando que todo sale de él y todo retorna a él.
En la 1º Epístola de San Pablo a los Corintios, capítulo 15, versículo 24 nos dice:
Luego, el fin, cuando entregue a Dios Padre el reino. Después de haber destruido todo principado, dominación y potestad. Porque él debe reinar hasta que se ponga a todos sus enemigos bajo sus pies. El último enemigo en ser destruido será la Muerte. Porque ha sometido a todas las cosas bajo sus pies. Mas cuando dice que todo está sometido, es evidente que se excluye a Aquel que ha sometido a él todas las cosas. Cuando hayan sido sometidas a él todas las cosas, entonces también el Hijo se someterá a Aquel que ha sometido a él todas las cosas, para que dios sea todo en todos.
Cristo es el alfa y la Omega, el principio y fin. De todo lo creado por el Padre.
Por eso es que si queremos hablar de existencia debemos hablar de Cristo y no de Dios,
mas para ello debemos tomar el término en su verdadera dimensión.
Cristo es la manifestación pero cuando vuelva a Él es no existencia.
Dicen los musulmanes que uno de los mayores pecados es el Existir,
pues en ello está implícito que estamos afuera de la esencia.
Dice de sí:“¡Yo soy!”, YSY ¡Yo Soy el que Soy! 70
Su existencia, ex–sistencia. Que es igual a decir que está en el mundo, existir es sinónimo de aparecer.
Veamos Sisto, verbo latino que significa estar, permanecer, sostenerse.
Ex algo que siste, es decir que tiene Ser fuera del mundo y sale para existir.
¿Por fuera de algo?
En La Biblia dice de sí “Yo Soy” palabra rebis o sea se lee de un lado y del otro: yoSoy.
Si soy, estoy conjugando el verbo en la primera persona del presente indicativo del verbo Ser.
Verbo en sí extraño el del Ser, porque está compuesto por un lado del radical esse, ser en italiano y de sedere, sentarse en el mismo idioma.
Aquí nos informa de la permanencia Divina, su estar, el estar sentado, (siempre nos describe su trono) sugiere permanencia, su eterno presente.
Su Nunc Estans.
Muestra su acción deviniendo en el tiempo; y es eterno porque es siempre el instante presente,
momento entre el pasado y el futuro.
Dice: Yo Soy lo que Soy.
Así se presenta a sí mismo por primera vez.
Y también dijo: Seré lo que seré.
En el Apocalipsis dice: Que es, que fue y que será.
Es un Ser activo y reafirmante, Yo Soy, si dijera simplemente
Soy, estaría implícito que está hablando de sí mismo. Pero él lo aclara.
Dice de sí mismo: Yo Soy el que Soy.
Define su ser, Ego, Yo - Summ, Soy.
E h i é a s h e r E h i é .
Pero todo debe retornar a Él, todo se resume en Él y por Él.
Otra vez la nota Re como dominante en el texto y por fin nos encontramos con el re-torno, con el ser Re-sumido. Re-sumen.
Todo vuelve a empezar, y apunta a la sumidad de Dios.
Aseidad, sumidad, e quedeidad e ipseidad de Dios en su insondable profundidad, e inabarcable altura.
También es el Amén71, ¡Así sea! término antiguo que no ha sufrido demasiadas variaciones y sobrevive al tiempo, palabra hebrea de influencia egipcia pero de origen sánscrito. Que revela el sonido original aum, om, amen.
Llamado también IAO.
También es el Aleluya o Hallet-lu-Yáh, alaben al Señor, y el Hosanna, sálvame ahora.
O sea pura actividad en su permanencia, por eso solo por tus obras serás conocido. Él es su obra y su obrar.
Que Amén signifique, así sea, es verdad, y a su vez, amor y en la conjugación verbal sea el imperativo de Amor,
¡amen! me hace ver la perfección que me rodea.
¡Amen!, amén, traducción de la orden original del sonido verbal emitido en el origen.
¡Así sea que en verdad se amen!
En esa orden verbal original está inmerso el sonido del Ritmo Divino que nos devuelve al principio.
El silencio.
Quiero compartir como sello de este ritmo, un poema de San Juan de la Cruz, que bellamente relata lo que sucedió en mi interior al tratar de Dios o como quieran llamarle.
Entreme donde no supe,
y quedeme no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.
Yo no supe dónde entraba,
pero, cuando allí me ví
sin saber dónde me estaba,
grandes cosas entendí;
no diré lo que sentí,
que me quedé no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.
De paz y de piedad
era la ciencia perfecta,
en profunda soledad,
entendida, vía recta;
era cosa tan secreta,
que me quedé balbuciendo,
toda ciencia trascendiendo.
Estaba tan embebido,
tan absorto y ajenado,
de todo sentir privado,
y el espíritu dotado
de un entender no entendiendo,
toda ciencia trascendiendo.
El que allí llega de vero
de sí mismo desfallece;
cuanto sabía primero
mucho bajo le parece,
y su ciencia tanto crece,
que se queda no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.
Cuanto más alto se sube,
tanto menos se entendía,
que es la tenebrosa nube
que a la noche esclarecía;
por eso quien la sabía
queda siempre no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.
Este saber no sabiendo
es de tan alto poder,
que los sabios arguyendo
jamás le pueden vencer;
que no llega su saber,
a no entender entendiendo.
toda ciencia trascendiendo.
Y es de tan alta excelencia
aqueste sumo saber,
que no hay facultad,
ni ciencia que le puedan emprender;
quien se supiere vencer
con un no saber sabiendo,
irá siempre trascendiendo.
Y si lo queréis oír,
consiste esta suma ciencia
en un subido sentir
de la divinal esencia;
es obra de su clemencia
hacer quedar no entendiendo
toda ciencia trascendiendo.
Continuará
*
Notas
64 El canto del Pájaro, de Anthony de Mello.
65 1ª Epístola de San Juan.
66 Buceen en la etimología de esos términos.
67 Ex–istencia, leer sobre ello en el Programa Agartha.
68 Éxodo, capítulo 19, versículo 9.
69 Epístola de San Pablo a los Colosenses, capítulo 1, versículo 15.
70Exódo, capítulo 3, versículo 14.
71 En idioma Pali, Amen, deriva de Aumen, cuyo sentido es: Dios madre-padre está con la humanidad.
